Cada ser humano tiene sus propias aptitudes y si sabe trabajar con ellas y desarrollarlas puede convertirlas en grandes talentos. Pero lo que sucede muchas veces es que no prestamos ni más mínima atención a nuestras habilidades, las consideramos como algo normal y ordinario o ni siquiera somos conscientes de ellas.
Tenemos una idea equivocada de que un talento es algo que se tiene o no se tiene, y no hay nada que hacer al respecto. Por ese motivo, muchas veces analizamos las situaciones con esquemas reducidos y eso nos impide que encontremos respuestas adecuadas. Abandonamos cualquier intento de seguir adelante, juzgando cualquier esfuerzo como una pérdida de tiempo y energía.
En realidad, Nosotros Mismos somos mucho más de lo que creemos ser. Todos poseemos unas cualidades y poderosos dones con las que podemos hacer algo de forma especial y diferente a los demás. Solo tenemos que trabajar para desarrollarlos, fortalecerlos y convertir en nuestros talentos.
5 claves para identificar y desarrollar tus aptitudes.
1. Realiza aquello que te gusta.
¿ Que te resulta fácil de hacer ? - si sabrás responder a esa pregunta identificarás tus aptitudes y dones.
Cuando tienes un don o una aptitud en algo, realizas con facilidad las actividades relacionadas con ello.
En comparación con los demás requieres de un menor esfuerzo para realizar la misma tarea.
Las actividades que te gustan , que te brindan disfrute y diversión, son aquellas en las que alguna aptitud personal se está poniendo en juego.
Además, es interesante comprobar que esta facilidad no se limita a una sola área, sino que se manifiesta en todas las actividades que están relacionadas. La facilidad con que realizas estas actividades hace que, en la mayoría de los casos, desarrolles rápidamente un gran dominio sobre ellas.
2. Busca opiniones en tu entorno.
En general, tus aptitudes son bastante visibles para los demás, en ocasiones, tal vez incluso más que para ti mismo/a.
Se nos da mucho mejor ver y detectar “cosas” de otra persona, que de nosotros mismos. Por eso, los padres, los amigos, pareja, los compañeros de trabajo suelen detectar con bastante rapidez tus potencialidades o capacidades más destacadas.
Por ello, escuchar lo que te dicen aquellas personas que te rodean puede ser una buena forma de investigar dónde se encuentran tus principales virtudes.
Por supuesto, no debes tomar estas opiniones ajenas como algo definitivo ni desestimar los deseos propios para lanzarte sobre aquello para lo que otros te consideran apto.
Tener en cuenta la mirada de los demás y más si coincides sobre aquellas cosas en las que destacas puede ser muy enriquecedor.
3. Potenciar las aptitudes.
Una vez detectadas las aptitudes hay que trabajar con ellas, desarrollarlas y entrenarlas. Solo podemos conocer algo a fondo involucrándonos en ello, es decir, animándose a transformarlo, adaptarlo, mejorarlo, modificándose uno mismo en el proceso. Se trata de seguir avanzando en los pequeños detalles.
Valora la innovación, la exploración y la creatividad.
4. Perder el miedo al fracaso.
El miedo a fracasar es la principal causa de que no nos atrevamos a desarrollar nuestros talentos y los mantengamos ocultos, incluso para nosotros mismos.
Si dejamos abierta la mente, tanto hacia fuera como hacia adentro, nuestro campo de información se amplia y al final nos damos cuenta que sabemos y podemos con nuestras tareas vitales, que nuestras aptitudes valen mucho.
5. Compromiso y persistencia.
Si añadimos una cuota de compromiso y persistencia y otra cuota de entrenamiento a nuestras aptitudes, estaremos desarrollando todo el potencial de nuestra gran virtud que es nuestro propio talento.
Como dice el conocido aforismo: “ El talento es diez por ciento inspiración y noventa por ciento transpiración”.
Es decir, que gran parte de la genialidad se encuentra en el esfuerzo que realizas.
“ Desarrollar un talento no es crearlo, es hacer crecer un don que ha nacido con nosotros poniendo en ello la energía, que solo dedicamos a las cosas que más nos importan y utilizando todo lo que otros pueden enseñarnos”. Jorge Bucay
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